Webinar Frontal Trust | De la crisis a la oportunidad: Alternativas para resolver el déficit habitacional en Chile
El encuentro contó con la participación de dos panelistas expertos en temas de vivienda: Sebastián Bowen, sociólogo PUC, Master en Políticas de Desarrollo (MIDP) de la universidad de Duke y director ejecutivo de Déficit Cero; y Nicolás León, ingeniero comercial PUC, Magíster en Administración Pública de la universidad de Columbia y gerente de Estudios y Políticas Públicas de la CChC, quienes analizaron la emergencia habitacional que aqueja al país y entregaron sus visiones para lograr el tan anhelado “déficit cero”.
Muy interesante y concurrido resultó el encuentro realizado por Frontal Trust junto a Diario Financiero, esta vez para abordar el déficit habitacional y los cambios que se deben implementar en materia de políticas públicas para terminar con la situación de emergencia, hacinamiento y personas en situación de calle que enfrentamos como país. El webinar fue moderado por Paula Vargas, subdirectora de Diario Financiero, y contó con Andrés Echeverría, presidente y portfolio manager de Frontal Trust, como anfitrión.
En su presentación sobre las causas y factores que explican la escasez de viviendas, Nicolás León enfatizó que el problema del déficit es crítico. Dijo que en el periodo 2017 – 2035, la demanda por viviendas alcanzará a 2,6 millones de unidades, lo que significa 143 mil viviendas por año para cubrir esta necesidad, lo que no se está cumpliendo actualmente.
Añadió que un problema grave es que a partir del año 2011 se observa un creciente desacople entre los ingresos de las familias y el precio de las viviendas, que ha ido al alza, lo que ha hecho imposible para una gran parte de la población acceder a una vivienda propia.
Explicó que hay distintas causas que influyen en el aumento del precio de las viviendas, pero destacó que el más importante es el incremento sostenido en el precio del suelo, que explica cerca de la mitad del alza. Señaló que esto tiene que ver con restricciones normativas y regulatorias a la constructibilidad, límites urbanos, postergaciones y demoras en permisos y, especialmente, falta de inversión en infraestructura urbana para ampliar la base de terrenos y suelos atractivos para construir.
Advirtió que estas condiciones también han impactado en la efectividad de la política habitacional, disminuyendo drásticamente el número de soluciones sociales en los últimos años.
Entre los principales desafíos que habría que abordar desde la normativa y las políticas públicas para enfrentar el problema, además del ya mencionado precio del suelo, citó el acceso al financiamiento, incentivos a la demanda, racionalización de burocracia (existen 400 permisos distintos otorgados por 53 instituciones públicas distintas) y la certeza jurídica.
Manifestó que se trata de una emergencia país, que hay que resolver con urgencia, ya que viene generando un malestar que ya estuvo presente en las protestas del estallido de 2019, y que se hace necesario un acuerdo nacional para resolver la problemática.
Sebastián Bowen coincidió con León sobre la gravedad de la situación y la tildó de “emergencia”. Manifestó que detrás de la falta de viviendas se esconden problemas como el hacinamiento, el allegamiento, los arriendos abusivos y la situación de calle, entre oros.
Dijo que la propuesta desde Déficit Cero para acortar la brecha se basa en tres pilares:
- Impulsar la oferta: a través de un mayor acceso a suelo, más financiamiento, agilizar trámites e industrialización.
- Diversificar la oferta: a través de un mecanismo de arriendos públicos en alianza con el sector privado y desarrolladores; urbanización, soluciones unipersonales, soluciones para el adulto mayor y soluciones financieras para sectores medios.
- Conectar la oferta: poner foco en planes de acción local con la participación de autoridades, sector privado y sociedad civil.
Respecto a la alianza público-privada para la vivienda en arriendo explicó que las distintas necesidades y oportunidades que se dan en el contexto de nuestras ciudades justifican impulsar un modelo de arriendo de interés público, aprovechando el financiamiento y la administración privada. Dijo que se trata básicamente de un modelo de concesiones, donde el Estado pone a disposición terrenos del banco de suelo público, para que el sector privado invierta, desarrolle y oferte en arriendo, conjuntos habitacionales destinados para sectores medios y vulnerables, que a su vez son asistidos con un subsidio a la demanda para estos efectos.
Bowen -en línea con lo manifestado por Nicolás León- advirtió sobre los serios riesgos para la cohesión social y la institucionalidad si no somos capaces como país de avanzar en soluciones urgentes para el déficit de viviendas.
También se mostró partidario de un gran pacto urbano habitacional por el desarrollo de Chile, que sea capaz de levantar recursos equivalentes a 6% del PIB que es lo que se necesita para los próximos 10 años.